24 abr 2008

Mala Vida

Creo que hace ya bastante tiempo que no escribía nada en este viejo pedazo olvidado del ciber espacio... pero ahora lo estoy haciendo y eso es lo que cuenta, así que no quiero reclamos ni lloriqueos en los comentarios (quiero elogios y números de tarjetas de crédito).
La razón principal por la que no había actualizado el Sergiolog es la falta de tiempo... o más bien la falta de ganas, porque si uno quiere hacer algo siempre busca algún momento para ello... en fin, elige la razón que más se ajuste a tu filosofía o modo de vida... también podría inventar que me secuestraron los payasos del circo que está junto a mi casa, pero no lo hice porque quería ser completamente honesto con ustedes y porque no se me ocurrió hace dos segundos que escribí las lineas de arriba.
Pero ya basta de justificaciones inútiles, ahora que ya estoy aqui, la fiesta puede comenzar. Bueno, no. De hecho no, les voy a dejar un dibujo, un comentario correspondiente, me despediré, explicaré el porqué el título del post y me iré... entonces podrán esperar a que vuelva a escribir por otro mes.

Irrealidad

Irrealidad


El dibujo de hoy representa un sueño que tuve hace relativamente poco. Verán, yo estaba alegremente en un bosque con toda la gente feliz, cuando de la nada se me apareció un hada y me pidió que la tomara en mis manos y huyéramos de la gente. No encontré ninguna razón para decirle que no, así que lo hice. Corrí con ella lejos de la multitud por algún tiempo, hasta que empezó a llover... entonces me detuve y ella me protegió del agua (con sus poderes místicos de hadas o qué se yo...), no sé, me empecé a encariñar con la pequeñuela.
Después de algún tiempo ella me dió a entender que quería casarse conmigo, que nuestros hijos serían flores y un montón de locuras más. Me ofreció placeres y bellezas que aún no podía imaginar... al parecer yo no entendía lo que me quería decir (a pesar de que podía hablar y era perfectamente clara con sus palabras y gestos). Eventualmente me desperté y no recuerdo en qué terminó... pero creo que nos casamos por medio de un juego de mesa, o quizá ese fue otro sueño.
Al despertar traté de razonar lo que mi cerebro acababa de presentarme, pero no me sacaba de la cabeza la idea de que todo fue ridículo... en fin, no me quedó más remedio que tratar de dibujar lo que recordaba y hacer esta inútil entrada para leerla años más tarde y recordar este sueño.

PD-> El título del post no es porque tenga una mala vida, sino porque estoy escuchando a Gogol Bordello. Siempre me ponen de buen humor.

2 comentarios:

Pablo Prats dijo...

Tienes una mente muy retorcida... hey! así se llama tu blog! duhhh

jerónimo dijo...

jaja orale, nos vemos en un mes... oye, el hada te ofrecía placeres por dinero, o era de corazón?